Fuente: ecoportal.net

Fábrica de Celulosa. El Escándalo de Botnia

Por Miguel A. Cabrera *

El Grupo Botnia de Finlandia comienza la instalación de una inmensa fábrica de celulosa. Producirá al año 1.000.000 de toneladas de celulosa, que exportará a Europa, China y a EE.UU. Tiene cinco plantas de celulosa en Finlandia y en otros países, uno de ellos Chile. Esta producción hará que se consuman anualmente 3.500.000 m3 de madera.

Un monstruo grande y pisa fuerte

El Grupo Botnia de Finlandia comienza la instalación de una inmensa fábrica de celulosa a 4 km de la ciudad de Fray Bentos. Producirá al año 1.000.000 de toneladas de celulosa, que exportará a Europa (50 a 55%). China (30 a 35%) y el resto a EE.UU. Tiene cinco plantas de celulosa en Finlandia y otras en otros países, uno de ellos Chile. Aproximadamente el 80% de su producción de celulosa se vende a fábricas de papel, propiedad del mismo grupo empresarial. Esta producción hará que Botnia consuma anualmente 3.500.000 metros cúbicos de madera. (11)

Este monstruo sacará cada día 86 millones de litros de agua del Río Uruguay y un 80% de este volumen lo volcará de nuevo al río pero ahora a elevada temperatura y “con una carga de contaminantes diversos que afectarán mortalmente la biología del río y el conjunto del ecosistema, las usinas potabilizadoras de agua para consumo humano y los usos diversos del recurso para las poblaciones asentadas en las márgenes (Fray Bentos, Las Cañas, Gualeguaychú, Nueva Palmira, Carmelo, Colonia), también los usos agrícolas del agua para el riego de cultivos y el suministro de agua a los ganados, etc.” (3) Serán “200 toneladas anuales de nitrógeno” y “20 toneladas de fósforo” las que verterá el monstruo en el Río Uruguay. Por si esto fuera poco, la planta enviará diariamente a la atmósfera, según las propias cifras de la empresa, “14 millones de metros cúbicos de gases promotores del efecto invernadero”. (2)

La planta modelo de celulosa Arauco, utilizando el mismo tipo de tecnología finlandesa que el grupo empresarial Botnia, acaba de ser suspendida por el gobierno chileno debido a su alto nivel de polución. Había comenzado a operar en febrero 2004. Con tecnología de punta, una inversión de mil millones de dólares, y sometida a un Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental A pesar de todas estas garantías no pudo evitarse “un derrame de sulfato que afectó a habitantes ubicados a 30 km de distancia, provocándoles dolores de cabeza, náuseas e irritación en los ojos.” Pudo constatarse que “vierte 900 litros de residuos (tóxicos) por segundo en el Río Cruces; sus olores nauseabundos llegan hasta la ciudad de Valdivia (a unos 50 km de distancia); y los animales domésticos que beben las aguas del río de los pozos cercanos, mueren” (13) En el caso de Botnia, la misma empresa reconoce como inevitable el mal olor que se expandirá a muchos kilómetros a la redonda.

Exigencia de Botnia: aceptación por Uruguay de un Acuerdo humillante con el Estado de Finlandia

A pesar de la existencia de leyes de inversiones que ofrecen generosas exoneraciones fiscales y estímulos para determinadas inversiones, el Grupo Botnia presionó al gobierno uruguayo para que firmara un Tratado específico con el Estado de Finlandia. Es la primera vez que una multinacional condiciona su presencia a la aceptación previa de un Tratado de Estado a Estado. El texto enviado por el Poder Ejecutivo al Parlamento el 21-03-02 fue aprobado por el Senado el 15-10-03 y el 4-05-04 por Diputados. Se opuso toda la bancada del Frente Amplio.

El texto del acuerdo, según el diputado Ricardo Castromán (5) no deja dudas: “No le da muchas salvaguardas, le da todas las salvaguardas. Se habla de compensaciones, se habla de que si se concreta la construcción de la planta de celulosa por parte de Botnia, que pertenece al Estado finlandés, esa va a ser tierra finlandesa donde nadie va a tocar nada ni revisar nada”. “El Tratado y fundamentalmente los artículos 5 y 9, están dándole todos tipo de prebendas al Estado finlandés y a este empresa que piensa instalarse y de esta forma nos parece que estamos en condiciones prácticamente insalvables en este momento”. El periodista José Irazábal le plantea a continuación lo siguiente: “Vamos a suponer que esta planta genera un problema de contaminación al agua del río. Es un tema de interés público, donde se podría intervenir, pero el Estado se compromete a compensar por lo que en realidad es un daño que está causando la propia planta”. Y Castromán contesta: “Efectivamente, es así”. Estamos en una situación de emergencia social y económica, precisamos urgentemente trabajo, pero “no a cualquier precios”, repite varias veces el diputado.

Monocultivo de eucaliptos: ¿un nuevo modelo de producción agraria?

En este momento conviene recordar que ya se está construyendo otra planta de celulosa a 12 kmt de Fray Bentos y a 5 de Botnia. Pertenece a ENCE (Empresa Nacional de Celulosa de España), cuya inversión y producción de celulosa serán aproximadamente la mitad del volumen comprometido en el proyecto de Botnia. La empresa Ence posee ya en la ribera oeste del río Uruguay una propia terminal logística denominada M’Bopicuá.

Esto quiere decir que los efectos ambientales de la planta celulosa Botnia se amplificarán con los efectos causados por la planta de ENCE. Aún en la suposición que las previsibles graves contaminaciones ambientales no se den, queda en pie que por el hecho mismo de que estas plantas de celulosa existan, se promueve y se agiganta el monocultivo de eucaliptus. Ya en 1995, cuando todavía no se hablaba de Botnia ni de Ence, la Red Uruguaya de ONGs Ambientalistas reafirmaban a la Dirección de Recursos Naturales del MGAP su crítica a la política de forestación. Pedían al Ministerio hiciera estudios serios sobre los siguientes impactos de la forestación sobre: a) el suelo, b) el régimen hidrológico, c) la flora nativa, d) la fauna nativa. Impactos que han sido comprobados en muchísimos países. (4)

En ese entonces tanto Botnia y Ence estaban en plena plantación masiva de eucalyptus para sus futuras plantas de celulosa. A través de su subsidiaria Forestal Oriental el Grupo Botnia cuenta con casi 100.000 hectáreas de plantaciones de “genética superior”. La meta es que el 60% de la madera empleada por Botnia provenga de su propia producción. (11) ENCE por su parte explota unas 50.000 hectáreas en Río Negro y Soriano.(7) Según Carlos Faroppa, asesor de Botnia, ambas plantas consumirán 5 millones de metros cúbicos por año y la capacidad instalada es de 8 millones y sigue creciendo.(11) Es decir, el monocultivo de eucalyptus se acrecienta en forma acelerada.

Chacareros de la zona denunciaron que por el monocultivo de eucaliptos el agua comenzó a escasear ya por 1995. Además detectaron otros impactos negativos: concentración de la tierra en pocas manos y extranjerización; tierras aptas para otros cultivos fueron forestadas; plagas que afectan a animales domésticos, cultivos y seres humanos; incendios; injusticia impositiva y desparece más mano de obra de la que generan. (6).

Todo el mundo conoce las condiciones de semi-esclavitud en que viven los trabajadores en estas empresas forestales. Un dato no menor, la Forestal Oriental o sus subsidiarias prohíben la sindicalización de sus trabajadores. (14)

¿Abandona Uruguay su Marca internacional de País Natural?

Uruguay sigue promocionándose en el exterior como País Natural. La contaminación que generarán estas dos plantas de celulosa atentará contra esta condición de país natural. La producción apícola, por ejemplo, con su cotizada miel ecológica, se verá afectada directamente por la contaminación aérea Alemania, importador muy importante de miel uruguaya prohíbe –según se dice- la importación de miel elaborada en un área de 100 kilómetros a la redonda de este tipo de plantas. (1) Otros productos ecológicos seguirán la misma suerte.

¿Negocio para quién?

¿Para Uruguay? Algunos piensan que ante una oferta de inversión de 1.100 millones de dólares hay que decir sí o sí, y cerrar los ojos. Pero equivocan sus números. De esos 1.100 millones solamente 200 millones se invertirán en el Uruguay. Los otros millones van directamente a Finlandia y Suecia, por la compra de maquinarias y otros servicios. (11) ¿Nuevos empleos? Según la misma empresa, una vez puesta en marcha la planta necesitará solamente 300 trabajadores Siendo una cifra dada por la empresa hay que tomarla como el número máximo de nuevos empleos. De los cuales, según la empresa, solo ocho podrán ser contratados con solo primaria completa. A los otros se les exigirá capacitación técnica. Muchos de ellos vendrán del exterior. Se orgullece la empresa diciendo que no más de ocho operarios monitoreando los paneles de control bastan para mantener en funcionamiento toda la planta. (14) Por otra parte, se calcula que se van a perder unos 1.500 trabajos en la pesca, la apicultura, el turismo y otras actividades afectadas directamente por la contaminación acústica, del agua y del aire producida por la planta.(8 y 10) ¿Empleos mientras se construye la planta? Sí, pan para hoy hambre para mañana. Además estos trabajadores temporales distorsionarán en gran medida durante ese corto tiempo el normal funcionamiento de la ciudad de Fray Bentos.

¿Negocio para aquellas empresas forestales que no son de Bosnia o de Ence? Para ellas poco o nada va cambiar. En vez de exportar los troncos de eucalyptus los venderán a las plantas, probablemente a un precio menor. ¿Negocio para los transportistas? Con o sin fábricas de celulosa los troncos tienen que ser transportados. ¿Negocio portuario? Ninguno, pues la terminal es de la empresa y en régimen de zona franca.

El negocio es de punta a punta del Grupo Botnia. Compra tierra a menor precio y produce eucalyptus dos veces más rápidamente que en Finlandia, Además, los trabajadores forestales son los peores remunerados en el campo y sin medidas de seguridad y condiciones de vida razonables. Esta multimillonaria empresa por otra parte está exonerada de todos los impuestos y de las tarifas aduaneras para importar y exportar. Además dispondrán gratis de ingente cantidad de agua, de carreteras y puentes construidos con el dinero de los uruguayos etc.

En un reciente artículo publicado en un medio de prensa finlandés en Internet se señala que “El director ejecutivo de Metsä.Botnia -empresa que tiene el 51% de las acciones del Grupo Botnia- confía en que la planta sea muy competitiva; en comparación con las fábricas de celulosa modernas de Finlandia, los costos de producción estimados serían alrededor de la mitad”. (11)

El químico argentino Luis Grianta expresaba: “estamos presenciando algo monstruoso que es la instalación de las dos plantas de celulosa en Fray Bentos (…) qué estudios se puedan hacer a estos sinvergüenzas que los sacan de Europa por contaminadores y que vienen con plata para corromper a cuanto organismo o cuanto legislador o gente se les ponga en el camino” (12)

Un escándalo a todo color


Algo produce escándalo cuando hiere gravemente el sentido común y las convicciones profundas de una población. ¿De que otra manera podemos nombrar el impacto que produce en los uruguayos cuando nos vamos enterando de este gran negocio de Botnia y de los males que traerá al país? No solamente los directos producidos por el funcionamiento de la planta sino también porque promueve el monocultivo del eucalyptus, la producción que menos manos de obra ocupa, la más chupadora de agua, secando napas y afluentes, de intenso uso de pesticidas y generadora de plagas varias. Todos sabemos además que el Norte rico está llevando todas sus industrias contaminantes al Sur. (13)

Por ahora el gobierno y los medios masivos han logrado que Botnia no exista para la población uruguaya. Muy recientemente el semanario Brecha ha roto valientemente este silencio. Un centenar de organizaciones ambientalistas y sociales del Litoral, uruguayas y argentinas, se están movilizando y haciendo oír su voz. Esperemos que se convierta en un inmenso clamor, que golpee los oídos y el corazón del gobierno uruguayo.

El infame Acuerdo de Inversiones con el Gobierno de Finlandia


Parte importante de esta infamia consiste en que el Acuerdo es presentado para promover y proteger las inversiones uruguayas en Finlandia y las finlandesas en nuestro país. Por esta reciprocidad puede orgullecerse el gobierno uruguayo de un Acuerdo “con reglas que otorgan una total y constante protección y seguridad jurídica a las inversiones realizadas por inversores de una Parte en el territorio de la otra; facilitando la libre transferencia, sin demora injustificada y en moneda libremente convertible, de todos los pagos vinculados con las inversiones; brindándoles dentro de su territorio un tratamiento justo, equitativo y no discriminatorio, para el ingreso y permanencia del personal, para la administración, para el mantenimiento, uso, goce, adquisición o disposición de las inversiones realizadas por inversores de la otra Parte Contratante, sobre una base no menos favorable que la acordada a sus propios inversores o a los inversores de la nación más favorecida, cualquiera fuera el más favorable para el inversor”. (14) Los uruguayos vamos a gozar de todos estos privilegios cuando invirtamos en Finlandia, mientras tanto serán todos para el grupo Botnia. ¡Cuánta hipocresía y cinismo en esta formulación de reciprocidad!

No para allí el cúmulo de prebendas. El Poder Ejecutivo admite que “las inversiones realizadas”…” no serán expropiadas, nacionalizadas ni sujetas a medidas que tengan efecto equivalente a la expropiación o nacionalización, excepto por razones de interés público, sobre una base no discriminatoria, en virtud del debido proceso legal. La compensación resultante, que incluirá intereses a la tasa comercial, equivaldrá al justo valor de mercado de la inversión expropiada, expresado en moneda de libre conversión y se garantizará a los inversores la libre transferencia de los pagos. Asimismo, contempla la indemnización, compensación u otros acuerdos, respecto de las pérdidas que sufran los inversores (…) por causa de guerra u otros conflictos armados, estado de emergencia nacional, revuelta, insurrección o manifestaciones.” (15) Ud. Lector de Sol y Luna ha leído bien, hasta las manifestaciones (p.ej. contra la segura contaminación del Río Uruguay) están previstas, como posible causa de indemnizaciones cuantiosas a dar a los inversores!

El diputado Bergstein, que votó afirmativamente el Acuerdo, admite que estas son las reglas de juego impuestas por las grandes multinacionales. Oigamos sus palabras: “En el mundo entero hoy las grandes empresas privadas no hacen inversiones importantes fuera de fronteras si no median previamente estos acuerdos de protección recíproca con los mismos mecanismos previstos (…)” (16) Fijémonos una vez más en la expresión caza bobos de “acuerdos de protección recíproca”.

Frente al dicho de que todos los acuerdos son iguales explicó el diputado Pita que no todos son iguales: “Es muy diferente el tipo de acuerdos que se han suscrito con la República Popular China, con la República de Rumania y, en este caso, con la de Finlandia, y no solo en el mecanismo de solución de controversias, sino en varios aspectos vinculados al aspecto impositivo y al de las expropiaciones”. A lo cual añadió el Diputado Chifflet: “que no son todos iguales, pero si lo fueran, estoy aburrido de escuchar a los señores que propugnaban en favor de determinados acuerdos con el Fondo Monetario Internacional aquí y en otros países, diciendo: "Ah, pero en todos los países se firma lo mismo". Sí, ¡y así nos fue!, ¿verdad” (16)

El mensaje del Poder Ejecutivo no lo menciona pero este Acuerdo tiene su joyita propia, la figura de “expropiación indirecta”, que no aparece en otros tratados, algo totalmente nuevo, según dicen los entendidos. Esta manera de innovar, dice el Diputado Fonticierlla, “se hace con una laxitud tal que el inversor podría tomar una reforma tributaria, una reforma fiscal o cualquier modificación como una expropiación indirecta” y como tal sujetas al reclamo de indemnizaciones. (16)

El mito de las inversiones extranjeras

Se llama mito a grandes relatos que explican como son y deben ser las cosas. Relatos que por provenir de esferas superiores son admitidos incondicionalmente, verdades absolutas que impiden reconocer la propia realidad. Así nos pasa a nosotros con el mito de las inversiones extranjeras. Veíamos que el Diputado Castromán en una entrevista radial se sentía obligado a repetir muchas veces, ¡no a cualquier precio! Este mito rondó en el sí de los diputados que aprobaron el Acuerdo.

Esta inversión de Botnia nos traerá más daños y prejuicios que beneficios, más desocupación que nuevos puestos de trabajo, empobrecimiento de la zona en lugar de desarrollo. Pero es negocio y negocio suculento solo para los inversores. Sin embargo el solo hecho de que el Grupo Botnia invierta algo en el Uruguay (unos 200 millones de dólares) para que el mito diga: ¡es provechoso para el país!

Diputado Carminatti: “por un momento temí que esta inversión tan importante para el país, para nuestra región y para nuestro departamento quedara frustrada”. Diputado Acosta y Lara: “Evidentemente, aquí estamos los que queremos que las inversiones queden y los que quieren, con la máquina de impedir, que las inversiones no estén”. Diputado Machado: “Hemos votado afirmativamente este Acuerdo que, sin lugar a dudas, va a ambientar la inversión en sectores estratégicos de nuestra economía”. Diputado Abdala: “De un lado hay gente que empuja para sacar algunas cosas y del otro hay gente las tranca. ¡Qué pena que siempre están de un lado los que obstruyen y siempre están del otro los que empujan!” Diputado Trobo: “Vamos a ser claros: ¡Estamos hablando de un marco para inversiones! ¡No estamos hablando de una inversión! ¡Es un disparate que se pretenda que la opinión que estamos expresando aquí sea sobre un proyecto determinado!” (16)

Esta mitología habla maravillas de los inversores extranjeros y la realidad nos muestra a los inversores de carne y hueso. Los inversores de Dirox, los españoles de Uragua, los franceses de Gaseba, y si por desgracia nuestra llegan a instalarse las fábricas de celulosa, conoceremos entonces a los españoles de Ence y a los finlandeses de Botnia

Los necesarios estudios del impacto ambiental

Todo el mundo sabe que las plantas de celulosa son contaminantes. Lo que no se sabe es el grado de contaminación que alcanzará una futura planta. Nuestros vecinos Argentina, Brasil, Chile lo saben muy bien porque ya tienen plantas de celulosa. La reacción tan fuerte de los entrerrianos contra las fábricas de celulosa de Fray Bentos se debe en gran parte por su propia experiencia argentina y no la quieren sufrir en su propia región.. Estas fábricas contaminantes no se hacen más en Europa, las ofrecen gentilmente a nosotros, La Ing. Agr. uruguaya Anahit Aharonian, una especialista en estos temas, se preguntaba en diciembre del 2004: “Forestación y Plantas de Celulosa ¿alguien creerá en los espejitos de colores?” (18)

Como se sabe que son contaminantes los gobiernos piden a estas fábricas que hagan estudios sobre el impacto ambiental que tendrán sus fábricas para estar en mejores condiciones de monitorear y controlar esa contaminación. El Gobierno uruguayo lo hace por medio de su Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), instalada en el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente. El primer estudio de Botnia lo recibió DINAMA el 31/03/04. Debido a las incoherencias, carencias y contradicciones DINAMA pidió información complementaria que la empresa fue dando en el correr de todo el año 2004. La DIMANA después de todo este proceso “destaca que en reiteradas oportunidades la información se presentó en forma muy dispersa y no dio respuesta o dio respuesta no satisfactoria a las preguntas planteadas” (19)

DIMANA analiza todos los riesgos de contaminación de las aguas del Río Uruguay, del suelo, de la atmósfera, que de alguna manera aparecen mencionados en el estudio del grupo Botnia. A esto tuvo que añadir “una lista no taxativa de potenciales impactos que no han sido contemplados por el estudio del Impacto Ambiental presentado o que han sido considerados sin el enfoque ambiental adecuado” (19) Finalmente DINAMA da luz verde al emprendimiento de Botnia pero señalando una lista larga de requisitos que la empresa tiene que cumplir antes de poner en funcionamiento la planta. En las propia palabras de DINAMA: “EN EL ENTENDIDO DE QUE LOS IMPACTOS QUE SE GENEREN PUEDEN SER PREVENIDOS, MITIGADOS O COMPENSADOS SI LAS ACTIVIDADES SE REALIZAN SEGÚN LO PLANTEADO Y SE TOMAN LOS RECAUDOS PERTINENTES.” (19)

Tanto los estudios -de la empresa Botnia como el informe final de DINAMA fueron duramente cuestionados por la Comisión Multisectorial que agrupa organizaciones ambientalistas y técnicos especialistas universitarios. En relación al informe final presentado por el Grupo Botnia en diciembre pasado con el título Informe Ambiental Resumen el juicio es lapidario: “El informe no cumple con las reglas que impone el método científico: es vago en sus afirmaciones, contiene contradicciones internas y no presenta fuentes bibliográficas que permitan constatar la veracidad de las antes nombradas afirmaciones. Esto último invalida ‘per se’ la función que dicho Informe pueda cumplir” (17)

La conclusión a que llega esta Comisión Multisectorial es obvia y no por esto menos angustiosa: “EL Informe Ambiental Resumen es la carta de presentación tanto del proyecto como de la firma que lo va llevar a cabo. Es el elemento de juicio que tenemos en nuestras manos para juzgar ambas cosas (…) EN ESE CONTEXTO Y EN FUNCIÓN DE LA FALTA DE CALIDAD CIENTÍFICA Y TÉCNICA DEL INFORME, SE INDUCE QUE ES DEMASIADO RIESGOSO PARA LA SALUD DE NUESTRO MEDIO AMBIENTE PERMITIR QUE AQUELLOS CONSTRUYAN Y PONGAN EN FUNCIONAMIEN TO LA FÁBRICA DE CELULOSA“ (17)

¿Quién controlará al monstruo?

Como podemos apreciar en el dictamen de la DINAMA, los actuales gobernantes ponen toda su salvaguardia en el control que van a ejercer sobre Botnia. El razonamiento es: no podemos dejar pasar esta inversión de 200 millones de dólares; sabemos que la planta va a contaminar el medio ambiente pero la controlaremos para que no se superen unos límites razonables de contaminación. Es famosa la declaración de Francisco Centurión, intendente de Río Negro, de que “cualquier acción humana en este mundo moderno, sea ir de nuestra casa a nuestro trabajo en vehículo, supone un cambio en el ambiente, una alteración y una contaminación con ruido, con combustible quemado, con lo que fuere”, y la solución es, “pensar en cómo hacer otra (acción) para contrarrestar y poder volver a encontrar el equilibrio y el óptimo de calidad de vida para la gente”. (16)

Así de simple y con tal liviandad nuestras autoridades están tomando los inmensos riesgos que traerán consigo las plantas de celulosa de Botnia y Ence. Hay que tener en cuenta que además de las contaminaciones que hacen a su normal funcionamiento estas plantas están siempre expuestas a un accidente, como siempre suele pasar. En ese momento los daños serán irremediables y poco ganaremos cerrando (¿aún así será posible?) la fábrica. A modo de ejemplo cabe mencionar el caso de la empresa Celulosa Arauco, instalada hace sólo un año, en una zona cercana a la ciudad de Valdivia, Chile, equipada con la última tecnología finlandesa, estando sujeta a un estricto control, y después de ser clausurada en reiteradas ocasiones, acaba de ser definitivamente cerrada por orden judicial, debido a los inmensos daños irreparables que ha producido en el medio ambiente.

El Dr. Ing. Químico Ignacio Stolkin por la Comisión Multisectorial le pregunta al subsecretario del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente lo siguiente: “¿No cree el Sr. Igorra que antes de hablar de control debería expresar qué entiende por ello? ¿O es que piensa que controlar, en el sentido correcto de la palabra, que significa medir y luego actuar, es decir regular flujos y hasta cerrar la producción, se hace con pocos pesos? Solamente un equipo de estudio de dioxinas en aire y agua, conformado por un cromatógrafo de gases y un espectrómetro de masas de alta resolución cuesta varios cientos de miles de dólares. ¿Se comprará? ¿Quién lo pagará? ¿Y si dieran la orden de cierre, quién resistirá la presión de un posible juicio que, en función del acuerdo de inversiones Uruguay-Finlandia, le puede costar millones de dólares al País.? (¿Esta razón no estará ya jugando algún rol en toda esta historia?)”. (21)

A su vez la Ing. Agr. Anahit Aharonian se pregunta: “Por otra parte, ¿cómo vamos a controlar? ¿qué significa “controlar”? Si le damos el significado de “verificar” entonces, luego de ocurrida la contaminación estaremos en condiciones de dar a conocer –por ejemplo- la causa de un cáncer o la causa de alguna de las enfermedades respiratorias que ocurren en las zonas cercanas a este tipo de industria. También podremos verificar la exclusión social y empobrecimiento al que serán llevadas las poblaciones cercanas a las plantas y a los monocultivos forestales que alimentan a dichas plantas. Si le damos el significado de “regular” entonces tendremos que esperar a que el desastre ocurra para decir “mire, ocurrió tal error, ahora sabrá que debe corregir”, pero mientras tanto la población ya fue afectada y además siempre nos quedará la duda del nivel de corrección hasta el momento de la siguiente verificación.” (22)

Estas últimas semanas hemos oído de nuestros gobernantes que BOTNIA recibió el visto bueno final para la instalación de su planta de celulosa y se refieren a las conclusiones del informe presentado por la DINAMA (23). Veamos lo que dice literalmente el texto en su conclusión final: “Del análisis del proyecto de la planta de celulosa y estructuras asociadas no se encontraron impactos residuales negativos que lo hagan inadmisible, en el entendido -aquí viene lo más importante, callado sistemáticamente en los anuncios oficiales- de que los impactos que se generen pueden ser prevenidos, mitigados o compensados si las actividades se realizan según lo planteado y se toman los recaudos pertinentes”.

Ante los impactos ambientales que serán generados por BOTNIA, la DINAMA ve tres posibilidades: algunos podrán ser prevenidos, otros mitigados aunque no prevenidos, y finalmente, otros podrán ser compensados, es decir, ni prevenidos ni mitigados, solamente compensados. Pero esto sucederá “si” a) “las actividades se realizan según lo planteado”, y b) si “se toman los recaudos pertinentes”. La primera condición se refiere a que esta multinacional cumpla con los cuidados ambientales que promete guardar. La experiencia enseña que estas empresas por lo general prometen mucho y hacen poco. Ya hicimos mención que los estudios de BOTNIA carecían de rigurosidad científica. Vale entonces estar muy alertas. La pregunta es ¿la DIMANA está en condiciones de hacer este trabajo de monitoreo y de control? La segunda condición es tan importante como la primera, que BOTNIA para seguir adelante, tiene que tomar muy en cuenta una lista impresionante de exigencias y recomendaciones que le plantea la DINAMA. La pregunta es ¿si la empresa no cumple con estos recaudos podrá seguir adelante con la instalación de la planta? Visto el peso de la opinión pública -que da la impresión de que en este país fantástico todo anda perfecto con BOTNIA- el pueblo uruguayo tiene que mantener una doble alerta: a lo que hace y deja de hacer la empresa, y, lo que no hace y deja hacer el gobierno y el estado uruguayo.

En el párrafo siguiente al que hemos transcripto más arriba, DINAMA abre el paraguas y dice: “En tal sentido cobra especial relevancia la acción de seguimiento y control de las actividades que realizará el proponente (BOTNIA) y de la respuesta del medio ante la instalación del proyecto. Se entiende que esta es una tarea de gran magnitud, que debería llevar a cabo el Estado en estrecha colaboración con la comunidad local y con los propios proponentes del proyecto” (cursiva mía). Parecería que los técnicos de la DIMANA fueran muy conscientes de lo que les viene encima. Hemos oído en estos días la versión del gobierno de que el pueblo uruguayo puede dormir muy tranquilo porque la DIMANA tiene todo bajo control. Parece que los técnicos pensaran, si no contamos con el apoyo de la población, nada podremos hacer cuando se produzcan las grandes contaminaciones. Y por las dudas dejan sentado la necesidad de que la empresa colabore en esa “tarea de gran magnitud”. Sabiendo como saben que los directivos de la empresa serán los últimos en preocuparse, y de esta manera los técnicos dejan una puerta abierta para tener a quién culpar cuando acaezcan las catástrofes. Unas líneas más adelante los funcionarios de la DINAMA no temen confesar, hay “temas en que no hay conocimiento científico suficiente o concreto que pudiera refutar las afirmaciones que hace la empresa en cuanto a la inocuidad del efecto de sus emisiones”.

El inmenso daño que Botnia y Ence están haciendo al país

Hay que insistir no sólo en el tremendo daño que harán al país BOTNIA y ENCE sino también en el daño que ya están causando antes de la instalación de las plantas. Según datos proporcionados por técnicos vinculados a Guayubira (24), BOTNIA para producir en un año 1.000.000 de toneladas de celulosa requiere 3.5 millones de metros cúbicos de madera de eucalyptus. Si a esta cifra sumamos los 1.7 millones de metros cúbicos de ENCE para producir sus 500.000 toneladas de celulosa al año, tenemos que ambas plantas juntas consumirán al año 5.2 millones de metros cúbicos de madera.

Si se asume que un monte de eucalyptus de una hectárea crece al año promedialmente 25 m3 , ambas plantas consumirían al año el crecimiento de 210.000 hectáreas de eucaluptus. Pero como el corte del eucalyptus se hace promedialmente cada 8 años, necesitarían ambas plantas una forestación de 1.680.000 hás. Actualmente existen en el Uruguay unas 500.000 hás de plantaciones de eucalyptus y en la provincia argentina de Entre Ríos unas 150.000 hás. Esto significa que si ambas plantas se instalaran sería necesario para alimentarlas casi triplicar el área forestada actual. Es decir, los proyectos de BOTNIA y de ENCE están actualmente impulsando una inmensa forestación de monocultivo de eucalyptus, sobre todo en las tierras situadas a una distancia radial de 200 kmts. de Fray Bentos, es decir, en los departamentos de Soriano, Río Negro y Paysandú. Las mejores tierras nuestras abandonarán los cultivos de cereales y la ganadería intensiva para dejar lugar a los montes de eucalyptus.

Habría que enumerar otros daños que acarrea al Uruguay el monocultivo de eucalyptus. Primeramente, causa un incremento enorme de desempleo rural. La forestación es la producción agraria que menos mano de obra ocupa. Cada nueva hectárea ganada por el eucalyptus a otros cultivos, deja como saldo nueva desocupación. En segundo lugar, empeoran las condiciones de trabajo de los trabajadores, ya que los trabajadores forestales son los que menos ganan y los que trabajan en peores condiciones. Hasta ahora las empresas forestales del grupo Botnia prohibían la sindicalización de sus trabajadores. Esperemos que está situación con las nuevas medidas laborales comience a cambiar. En tercer lugar, los eucaliptos consumen cantidades muy grandes de agua, superficiales y subterráneas, con consecuencia para los campos linderos. Además de otras pestes que surgen por el uso abusivo de pesticidas y herbicidas, y la multiplicación de cotorras y carpinchos. Finalmente, está el inmenso daño que se ocasiona a la red vial, por el tránsito de camiones con cargas de 40 o más toneladas y que se acrecentará año tras año. El costo de reparaciones constantes de caminos, rutas y puentes corre a cuenta de todos los uruguayos. Tampoco habría que desestimar los daños a la fauna y flora inherentes a la forestación cuando se convierte en monocultivo de eucaliptos.

Dioxinas y furanos: mortíferos agentes de contaminación

De aquí en adelante los uruguayos tendremos que aprender palabras nuevas, para comenzar a tener una mejor idea de los peligros que nos acechan. Todos tendremos que aprender que son las dioxinas y los furanos, aunque no hayamos estudiado química. En este sentido, la sociedad de la información de la cual tanto se habla, tiene que darnos una mano. No podemos ignorar los efectos super tóxicos de dioxinas y furanos si apreciamos en algo nuestra salud y la de nuestra gente.

Para esta información utilizo un material proveniente de México, recopilado por el Maestro Fernando Bejarano y revisado por la Dra. Lilia Albert. Posiblemente no entendamos mucho de lo que voy a transcribir, pero algo vamos a entender, lo suficiente para seguir preguntando, buscando, investigando.

Las dioxinas, cuyo nombre genérico es policloro dibenzo-p-dioxinas (PCDD) son el nombre con el que se conoce a un grupo de 75 compuestos formados por un núcleo básico de dos anillos de benceno unidos por dos átomos de oxígeno en el cual puede haber como sustitutos de uno a ocho átomos de cloro. La dioxina más estudiada y más tóxica es la 2, 3, 7, 8- tetracloro-dibenzo-p-dioxina, conocida comúnmente como TCDD.

Los furanos cuyo nombre genérico es policloro-dibenzofuranos (PCDF) son un grupo de 135 compuestos de estructura y efectos similares a las dioxinas y cuyas fuentes de generación son la misma. Se considera que estos compuestos son los contaminantes principales de los policlorobifenilos (PCB). Cuando se hace referencia a las dioxinas y compuestos similares en los textos de divulgación se incluye también a los furanos y PCB.

Las dioxinas y los furanos se forman de manera espontánea en un gran número de procesos industriales, principalmente de dos modos: como un subproducto de procesos industriales en los que interviene el cloro, por ejemplo en la producción del plástico PVC, de plaguicidas y disolventes organoclorados; y en segundo lugar, durante procesos de combustión de compuestos organoclorados, esto es que tienen carbono y cloro en su molécula, como ocurre en los incineradores de residuos peligrosos..

La principal fuente de emisión atmosférica de dioxinas son los incineradores de residuos peligrosos y la principal fuente de emisión de dioxinas en el agua son las descargas de la industria papelera que usa gas cloro para blanquear la celulosa. Ambas fuentes de contaminación van a estar presentes en las futuras (ojalá que no sea así) plantas de BOTNIA y ENCE.

Las dioxinas y furanos son muy tóxicos, activos fisiológicamente en dosis extremadamente pequeñas, persistentes, al no degradarse fácilmente, y pueden durar años en el medio ambiente. La principal vía de exposición para los seres humanos es la ingesta de alimentos contaminados, especialmente carne y productos lácteos. Pueden tener efectos negativos en el desarrollo neurológico, reproductivo, conductual y en el sistema inmunológico de lactantes y niños. Pueden provocar cáncer y otros efectos crónicos en personas adultas.

Por último, los autores de este escrito afirman que en México se carece de la capacidad de análisis especializada para determinar con seguridad la presencia de dioxinas y furanos en muestras biológicas y ambientales, por lo que no existen datos de la presencia de estos contaminantes en la población, el ambiente o los alimentos y no ha sido posible establecer niveles comparativos con otros países; sin embargo, el que no haya datos no quiere decir que los problemas de salud o medio ambiente que puedan ser provocados por dioxinas o compuestos similares no existan.

¿Y qué diremos de nosotros? El Ing.Quim.Ignacio Stolkin en carta del 16 de mayo de este año le recuerda al Arq. Igorra, Subsecretario del Ministerio de Vivienda y Medio Ambiente, lo siguiente: “Es importante que haya hablado de los controles. Primero para hacer notar que, como gobernante, estaría dispuesto, si fuera necesario, a ahorrarle los 500.000 U$S a la firma Botnia, si ésta se negara a comprar los aparatos necesarios para analizar las dioxinas. Pero, además, sería bueno que el Sr. Subsecretario leyera el texto correspondiente a la Autorización Ambiental Previa, para convencerse de que, en el caso de las dioxinas y furanos policlorados, mal le iría. Por que la DINAMA sólo evalúa que para la fase gaseosa no se podrá traspasar el límite de 163mg/año (folio 9 numeral u). Y para la fase líquida no existe ni la mención a estos productos. Lo peor es que ni se indiquen métodos de medida, ni frecuencias de las mismas. ¿CÓMO VA A CONTROLAR Y REGULAR EL FUNCIONAMIENTO DE LA PLANTA?, ¿ME LO PUEDE EXPLICAR?”. (25) www.EcoPortal.net

* Miguel A. Cabrera
Artículo publicado en Sol y Luna Nº 84, 85 y 86, mayo/junio y julio 2005


Referencias

1.-Sergio Israel, Visiones del desarrollo, Brecha, 24-03-05, p. 11-12
2.-Carlos Amorín, ¿Quién necesita a Botnia?, Brecha, 24-03-05, p. 13
3.-Carlos Pérez Arrarte, ¿Cuánto valor agregado suman a la vida nacional? Brecha, 24-03-05, p.14
4.-ONGs reafirman su crítica a la política de forestación. Revista del Sur, Nº 49, 1995
5.-Entrevistas de José Irazábal a los diputados Ricardo Castromán y Ruben Carminatti. Radio el Espectador, 6-05-04
6.-Carta de los chacareros de Camino SADAM, Cerro Alegre, Ruta 14 y Paraje Pense, Comunicado de Prensa del Grupo Guayubirá, Mercedes, 7 de octubre de 2004
7.-Pablo Alfano, Intenciones de Papel, Brecha, 28-01-05
8.-Inversión de Botnia no será lo anunciado. Montevideo COMM/Portal, 09-03-05
9.-Botnia: ¿quién beneficia a quién? Grupo Guayubira, Comunicado de prensa, 28-03-05
10.-Carta Abierta a la empresa Botnia sobre forestación y plantas de celulosa, firmada por 24 organizaciones sociales de Uruguay y Argentina, Montevideo, 4 de junio 2004.
11.-Entrevista de E.Cotelo a Carlos Faroppa, asesor de Botnia, Radio El Espectador, 8-03-05
12.-Entrevista de José Luis Vázquez a Don Luis Grianta, químico argentino, CX 36 Radio Centenario, 26-03-05
13.-Comcosur al Día, 29-03-05. Fábricas de celulosa: Presidente Vázquez no recibió a Gobernador de Entre Ríos y Desastre en Valdivia, Chile.
14.- Mensaje del Poder Ejecutivo del 20-05-03 a la Asamblea General para la consideración del proyecto de ley que aprueba el Acuerdo entre el Gobierno de la República Oriental del Uruguay el Gobierno de la República de Finlandia, suscrito en Montevideo el 21-03-02.
15.- Entrevista de Emiliano Cotelo a Francisco Centurión, Intendente de Río Negro, Radio El Espectador, 25-02-04
16.- Actas de la Sesión de la Cámara de Representantes del día 04-05-04 cuando fue aprobado el Acuerdo con el Gobierno de la República de Finlandia relativo a la Promoción y Protección de Inversiones.
17.-“Observaciones y cuestionamientos” al “Informe Ambiental Resumen” presentado por el grupo Botnia, con la firma de 9 ingenieros, técnicos y profesionales en nombre de las organizaciones Movitdes, Asodern, Grupo Ecológico de Young, Grupo Ñandubay y Foro Ecologista de Paraná. Este largo escrito fue presentado el 29-12-04 al Director Nacional de Medio Ambiente del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente.
18.- Anahit Aharonian, Forestación y Plantas de Celulosa ¿alguien creerá en los espejitos de colores?, artículo publicado en el Boletín de FENAPES (Federación Nacional de Profesores de Secundaria del Uruguay), diciembre 2004
19. Informe de la División Evaluación de Impacto Ambiental del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, acerca de la Instalación de Planta de Cel-ulosa y Obras accesorias, del 11-02-05
20.-“Recurso Revocatorio” del acto administrativo Nº 63/2005, que autoriza al Grupo Botnia la instalación de una planta de celulosa, presentado por la Comisión Multisectorial al Sr. Ministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente.
21.- Preguntas al Arq. Jaime Igorra. Carta abierta publicada en la República el 2-05-059.
22.- Sigamos defendiendo nuestras convicciones, artículo de Anahit Aharonian de pronta publicación en el Boletín de FENAPES.
23.-Informe de la División Evaluación de Impacto Ambiental del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, acerca de la Instalación de Planta de Celulosa y Obras accesorias (Autorización Ambiental Previa), del 11-02-05
24.-Carta Abierta a la Corporación Financiera Internacional (DFI) (organismo financiero del Banco Mundial) promovida por el Grupo Guayubira y Redes Amigos de la Tierra, mayo 2005-06-07
25.-Carta del Dr. Ing. Quim. Ignacio Stolkin al Arq.Igorra, Subsecretario del Ministerio de Viviendas, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, 16-05-05
26.-Dioxinas y Furanos. Recopilación: Maestro Fernando Bejarano, Revisión: Dra. Lilia Albert, México, 2000


Tomado de
http://letras-uruguay.espaciolatino.com/

Ver también:
Uruguay suspende reunión con Argentina por planta de celulosa
Tensión entre Argentina y Uruguay
Planta de Celulosa: La otra cara de la moneda en Finlandia por Ricardo Carrere
Acusan al grupo Arauco de causar daños ecológicos y a la salud en Misiones y en Chile (21/06/05)
Carta Abierta a la empresa Botnia sobre forestación y plantas de celulosa
Fábricas de celulosa en Uruguay: A contramano del "País Productivo" Carlos Amorín
Plantas de celulosa: una burla hacia un acuerdo internacional Red de Acción en Plaguicidas – Uruguay (06/04/05)
Fábricas de celulosa: vacíos de información y contradicciones Sergio Israel
Rechazo a plantas de celulosa (Guayubira)
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Otra Planta de celulosa de Angelini también contamina en Argentina (02/06/05)
Celco contamina Santuario del río Cruces
Contaminacion ambiental en Misiones Por Ramón A. Beron (22/04/05)