Vecinos de Cotuí contra proyecto Pueblo Viejo de Barrick Gold

Fuente: Hoy Digital, 19 de julio de 2011

La mina, según los productores, ha sido descubierta en la cuenca de la presa de Sabaneta
Agropecuarios no permitirán Barrick explote mina de oro

Ver también:

Escrito por: MANUEL ESPINOSA ROSARIO (manuelespinosar@hotmail.com)

SAN JUAN DE LA MAGUANA.- Las principales asociaciones de ganaderos, productores de leche, agrícolas, apícolas, bananeros, de cítricos, porcinos y cooperativas, reunidas en esta ciudad, afirmaron que utilizarán todos los medios a su alcance para impedir que la Barrick Gold explote la mina de oro descubierta en la cuenca de la presa de Sabaneta y de los principales ríos que la abastecen, ubicados en la Cordillera Central.

En una masiva asamblea, celebrada en el local de la Asociación de Productores Agrícolas de San Juan, advierten al Gobierno que de permitirse la explotación del oro que, según se ha informado existe en el lugar, desaparecerán los ríos San Juan, Maguana, Yaque del Sur, Mijo, Dajay, Gínova, El Donao, y con ellos cerca de medio millón de tareas bajo riego y más de 15 mil cabezas de ganado.

Entre los presentes figuran el doctor Bolívar Toribio, presidente de la Asociación Dominicana de Hacendados y Agricultores; José López, de la Asociación de Productores de Pollo; Eric Rivero, de Asociación de Productores de Leche; Miguel Olivo, de la Federación Porcina; Juan Ignacio Bonilla, de los productores de Bananos; Rubén Hernández, de Federación de Ganaderos del Cibao; Juan Recio, ex director de Conaleche; Víctor Matos Pérez, de los ganaderos del Sur, y el ingeniero José Montero, de los ganaderos del Suroeste, entre otros dirigentes de los productores.

Advertencia

Manuel Matos Pérez, en representación de los productores agrícolas y ganaderos, advirtió que la Barrick Gold se propone explotar el oro que hay en la cuenca alta del valle de la provincia, en donde nacen los principales ríos, arroyos y cañadas, al unísono, con los brazos en alto y los puños cerrados, proclamaron que “primero tendrán que pasar por encima de nuestros cadáveres y de los de millares de hombres y mujeres porque de permitirlo, sería aceptar la desaparición de la producción”.