OLCA en la Prensa: La Nación, Santiago de Chile 26 de enero de 2003
GRAVES RIESGOS POR EL USO MAL REGULADO DE PLAGUICIDAS DOMÉSTICOS
El invitado de piedra
PROTEGEN NUESTRO HOGAR, Prometen acabar con cualquier bicharraco que invada la casa. Pero lejos de ser inofensivos, algunos de estos productos tienen efectos negativos para nuestra salud. Como era de imaginar: en nuestro país no existe una legislación específica que regule su uso.
Lorena Galea R. (Nacion Domingo)
Grandes soluciones para mejorar nuestra calidad de vida con sólo una advertencia: mantener fuera del alcance de los niños. Así se nos presentan los plaguicidas de uso doméstico, inofensivos, sin riesgos para la salud. Pero estos productos, que se compran con tanta facilidad en los supermercados y que muchas veces no indican mayores precauciones para su uso, pueden llegar a causar, incluso, la muerte.

El riesgo se ve más claro cuando se observa una serie de contradicciones e irregularidades reveladas en un estudio realizado por el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA).

 
Entre otros aspectos, el informe destaca el hecho de que en Chile se venden plaguicidas para uso doméstico, sanitario y veterinario que están prohibidos o fuertemente restringidos para uso agrícola, por ser cancerígenos o provocar graves alteraciones genéticas, pero que paradójicamente- pueden ser usados libremente en ambientes cerrados.

Otro punto fuertemente cuestionado por el OLCA es la norma provisional que regula estos productos químicos. Según el estudio, "llama la atención que un mismo reglamento contenga las normativas para productos muy diversos, que sirven para curar enfermedades, alimentos de uso médico, artículos de belleza e incorpore además en el mismo texto legal los plaguicidas de uso domiciliario y médico", esto porque actualmente los pesticidas se rigen por el Decreto Supremo Nº 1.876 para el control de productos farmacéuticos, alimentos de uso médico y cosméticos.

Por esa misma disposición transitoria, el OLCA advierte una serie de vacíos, pues no se contemplan algunos aspectos técnicos, como la ausencia de una clasificación toxicológica de estos plaguicidas. Tampoco se establecen restricciones de uso ni se dan las condiciones mínimas de información. Incluso, la organización hizo un catastro de los pesticidas de uso doméstico, sanitario y veterinario que violan las escasas normas de regulación.

LA RESPUESTA DEL SESMA

Ante los resultados de este estudio, organizaciones ambientalistas tomaron contacto con el Servicio de Salud Metropolitano del Ambiente (Sesma). En una reunión con su directora, Soledad Ubilla, se le informó de todos los antecedentes recopilados en el estudio. La respuesta: al día siguiente comenzó una fiscalización del servicio, en medio de la cual incluso se retiraron de los stand de varias cadenas de supermercados cerca de 20 productos incluidos en los datos proporcionados por el OLCA.

La información del retiro de los productos fue confirmada por Lucio Cuenca, coordinador nacional del OLCA, quien se enteró de esta disposición por medio del llamado de un indignado gerente de una de las empresas afectadas por la determinación del Sesma. Hugo Ocampo, Jefe del Departamento Jurídico del Sesma, indicó a La Nación Domingo que la fiscalización aún no ha terminado, porque se inició un sumario sanitario que busca la constatación científica de la "dañosidad" de los productos retenidos, para poder luego dictar sentencia y tomar las medidas correspondientes".

El reglamento que actualmente rige el uso de los plaguicidas de uso doméstico es provisorio y data de 1995. "Hay un abandono del Ministerio de Salud. Allí debió haberse regulado esto hace 5 años y desde esa fecha hasta ahora lo que hemos observado es una gran proliferación de productos en el mercado y no hay ningún control", dice Cuenca. En tanto, Pedro García -director del Instituto de Salud Pública (ISP)- aclaró que se está trabajando en la elaboración del reglamento específico para estos plaguicidas. Pero Lucio Cuenca desconfía. Dice que no le cabe ninguna duda de que en la mesa de trabajo sobre el proyecto, la industria química será la primera en estar presente.

RIESGOS PARA LA SALUD

Pero mientras se hace un nuevo intento por sacar una normativa específica, el peligro se mantiene. "Los plaguicidas son sustancias químicas que se desarrollan para producir la destrucción de algo, por lo que todos estos productos son tóxicos para el ser humano. No pueden ser usados como si fuera una sustancia que no produce daño", explica Clelia Vallebuona, encargada de la Red de Vigilancia de Intoxicaciones por Plaguicidas (Revep) del Ministerio de Salud. Agrega que el daño dependerá del grado de toxicidad del producto, del tiempo de exposición y del mismo sujeto expuesto.

De acuerdo con los registros de la Revep, durante el primer semestre del año 2002 fueron notificados por esa entidad 329 casos de intoxicaciones agudas por plaguicidas. De ese total, el 50 por ciento de las intoxicaciones requirió hospitalización y nueve fueron fatales, aunque siete de ellas tuvieron origen voluntario y sólo dos fueron accidentes no laborales en menores de uno y cuatro años de edad. De todos estos casos, el 69 por ciento correspondió a intoxicaciones por insecticidas y nueve casos por rodenticidas (controladores de plagas de ratones).