Proyecto Minero Pascua Lama

Comunicaciones OLCA 04/12/07

Ante aprobación de tendido eléctrico para Pascua Lama:
PASCUA FELIZ Y COMUNIDADES INDIGNADAS

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El Viejo Pascuero llegó a Teatinos 248, donde se ubican las oficinas de la ministra de Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, para ironizar sobre la entrega de 1600 hectáreas de terreno, 30 sitios arqueológicos, especies en peligro de extinción como loros y chinchillas, y otras serie de regalos que la Dirección Ejecutiva de la CONAMA hizo la semana pasada a Barrick Gold.

“Por demostrar tanto manejo de la naturaleza que no solo mueve glaciares, sino que los hace desaparecer, CONAMA regala a Barrick Gold las únicas reservas de Loros Tricahues del norte de Chile y el lugar donde habitan las chinchillas, ambas especies en peligro de extinción”, señaló el viejo pascuero junto a unas 20 personas que mediante lienzos y megáfonos expresaron su malestar frente a esta nueva decisión de la institucionalidad ambiental chilena.

El 21 de noviembre la Dirección Ejecutiva de CONAMA dio luz verde a las 363 Torres de Alta Tensión que pretenden surtir de electricidad a los megaproyectos mineros Pascua Lama, en la Tercera Región de Chile, y la mina Veladero, en la Provincia de San Juan, Argentina. El proyecto ‘Ampliación y mejoramiento línea de transmisión de alta tensión Punta Colorada - Tres Quebradas’, trasladará energía desde el Sistema Interconectado Central (SIC) hasta los emprendimientos de la transnacional canadiense Barrick Gold.

El tendido eléctrico que pretende atravesar el país de costa a cordillera por 155 kilómetros cruzará la “Quebrada de los Choros” en la IV Región de Coquimbo que ha sido declarado como sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad; atravesará parte de la propiedad de la Comunidad Agrícola de Olla de Caldera; afectará zonas usadas ancestralmente para el pastoreo; y además intervendrá por lo menos 30 sitios arqueológicos.

El año pasado, el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) recomendó que por afectarse el hábitat de especies únicas como el Algarrobillo, el Loro Tricahue y la Chinchilla Chilena, el proyecto fuera evaluado como Estudio de Impacto Ambiental, para garantizar la participación ciudadana. Sin embargo, la estrategia de la empresa fue retirar la solicitud y reingresarla nuevamente como Declaración de Impacto Ambiental (DIA), y aunque no cambian ni el trazado ni los impactos, esta vez la Declaración sí fue aceptada y los reparos del SAG y CONAF silenciados.

De hecho, las exigencias de mitigación que se le hacen a la transnacional canadiense son del mismo calibre del escándalo del “plan de manejo de Glaciares”, o sea, se le pide por ejemplo, para ayudar a la preservación, instalar señaléticas o hacer catálogos fotográficos de las especies que habitan (o habitaban) los lugares.

LAS PARADOJAS DE LA CRISIS ENERGÉTICA

Las organizaciones expresaron también su preocupación por el doble discurso energético del gobierno. Según Lucio Cuenca, director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) “no se entiende el actuar de la institucionalidad, por un lado, bajo el pretexto de satisfacer la demanda interna de energía, justifica la construcción de hidroeléctricas en una serie de ecosistemas a lo largo del país, como Aysén, Panguipulli y Río Maipo, e incluso ha llegado a hablar de centrales nucleares; mientras por otro lado, arrasa con el medio ambiente para garantizar suministro energético privados que operan en Argentina”.

La aprobación de este proyecto se enmarca en la práctica ya habitual de Barrick de presentar desagregadamente los requerimientos para explotar la alta cordillera de la III Región de Atacama. Si el proyecto de explotación hubiese sido presentado considerando el Centro Logístico de Vallenar, la Termoeléctrica de la Higuera (IV Región de Coquimbo) y el Tendido Eléctrico, hubiera requerido una Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) realizada por la CONAMA Nacional y con intervención de muchos más actores. Mediante la desagregración, la empresa evita hacerse cargo del impacto global que generan sus emprendimientos, cuestión que la autoridad puede aceptar, pero no el medio ambiente o las comunidades locales que sufrirán los impactos en su totalidad y no parceladamente.

La coordinación de organizaciones contra Pascua Lama de Santiago entregaron una carta a la Ministra de Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, dando cuenta de estas irregularidades y exigiendo que “como máxima autoridad ambiental del país, se informe de los alcances de esta aprobación y utilice sus facultades para revertir la decisión de la Dirección Ejecutiva de la CONAMA, de manera de evitar esta nueva irresponsabilidad histórica.